Entre el ir y venir de los avatares propios de la vida, se puede ir desvaneciendo el sentido mismo del existir en conexión con nuestro Creador que orienta nuestro caminar según su designio. La dinámica dialógica entre Dios y el ser humano lleva a clarificar el camino que el Señor va trazándonos en cada uno. Pero en un mundo lleno de ruido es difícil identificar la voz de Señor y el contenido de su mensaje, por eso es de importancia como consagrado poder generar ambientes y espacios propicios para facilitar que aquello que Él tiene para comunícanos sea escuchado en el corazón de todos aquellos que sienten el llamado a la vida consagrada.

Avivados por el recién resucitado y con el fin de acompañar a los jóvenes vocacionales de Ecuador en el desarrollo de un adecuado discernimiento que ponga sus vidas en sintonía con el proyecto de Dios, el día 8 de mayo en horas de la mañana se realizó un encuentro con jóvenes vocacionales de la parroquia San Juan XXIII de Duran, los cuales manifiestan deseos de continuar su proceso de discernimiento; la comunidad local identifica una presencia juvenil abundante y esperanzadora en orden a las cualidades de los jóvenes. Ese mismo día en horas de la tarde en las instalaciones del Cristo del Consuelo se llevó a cabo un encuentro con algunos vocacionales y Laicos promotores Vocacionales de Guayaquil, donde a la luz de Lc, 1, 26-38, se enfatizó en las virtudes marianas y el Sí de María.

El próximo 29 de mayo desarrollaremos un encuentro vocacional en la parroquia Santo Tomas de Aquino de Alangasí Quito. En Ecuador actualmente se acompañan un total de 28 jóvenes vocacionales.