Año 81 Mayo 17 de 2020- 6to DOMINGO PASCUA – Ciclo A – Color Blanco
HOJA dominical
día del señor
Ascensión del señor
Este domingo celebramos la solemnidad de la ascensión del Señor Jesús regresa al Padre, no abandona a los apóstoles y les pide integrar la familia de Dios con todos los pueblos de la tierra. Recordemos que en el evangelio de Mateo comienza con el anuncio sobre Jesús el Dios con nosotros, y hoy que leemos la conclusión el mismo Jesús es el que dice “yo estoy con ustedes” prometiéndonos su ayuda y acompañamiento en todo lo concerniente al anuncio del evangelio y en la tarea de su enseñanza a todas las naciones. Es otra manera en la que Jesús está, ya que es el Dios con nosotros. Hagamos una breve inmersión en los siguientes elementos:
Volver a Galilea: El resucitado los perdona y reinicia el proyecto del discipulado dándoles la oportunidad de participar de la misión, y así permanecerá hasta el fin de los tiempos.
Los discípulos. Ante el resucitado su reacción es la adoración, ya que ellos lo reconocen como Señor y Jesús afirma su filiación divina y poder sobre cielo y tierra.
El envió misionero con la autoridad suprema sobre el cielo y la tierra, los discípulos son enviados a otra tarea hacer discípulos a todas las gentes, invitar a otros al seguimiento de Jesús sin ninguna restricción e insertándolos en la nueva familia trinitaria finalmente, Jesús nos promete su presencia hasta el fin de los tiempos, la victoria en el momento que en Cristo se restauren todas las cosas.
RITOS INICIALES
RITO ENTRADA
MONICIÓN: Cristo sigue presente en nosotros. Su Ascensión no es separación, sino una nueva manera de presencia. Él sigue presente aquí en su palabra, en el pan, en el vino, en toda la Iglesia, en esta asamblea de hermanos. Por eso con Él, en memoria de su gloriosa Ascensión, vamos a celebrar nuestra Eucaristía.
ORACIÓN COLECTA
CELEBRANTE: Concédenos, Señor, sentirnos jubilosos en la alegre acción de gracias, porque la Ascensión de tu Hijo es nuestra victoria; y su Cuerpo, la Iglesia, espera llegar allí donde ascendió gloriosa su Cabeza, Jesucristo, nuestro Señor, que vive y reina…
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
MONICIÓN: En su Ascensión, Jesús confía su trabajo y misión a los apóstoles. El Espíritu Santo les dará la fortaleza necesaria para dar testimonio de Cristo, el Señor, al mundo entero.
De los Hechos de los Apóstoles 8,5-8.14-17
Mi primer relato, estimado Teófilo, lo dediqué a narrar lo que Jesús hizo y enseñó, desde el comienzo hasta el día en que Dios se lo llevó, luego de haber dado instrucciones con el poder del Espíritu Santo a los apóstoles que había escogido. Porque después de su pasión se les manifestó en persona dándoles numerosas pruebas de que estaba vivo, y durante cuarenta días se dejó ver de ellos y les habló del Reino de Dios.
Un día, mientras estaba comiendo con ellos, les dio esta orden:
«No se alejen de Jerusalén; esperen hasta que se cumpla la promesa de mi Padre, de la cual les he hablado. Porque Juan bautizó con agua, pero dentro de pocos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo.»
Reunidos, pues, con Él, le preguntaron: «Señor, ¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de Israel?»
Él les respondió: «No les corresponde a ustedes averiguar los tiempos ni los plazos; esa es cosa que el Padre ha fijado con su propia autoridad. Pero recibirán la fuerza del Espíritu Santo que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta los confines de la tierra.»
Dicho esto, lo vieron ascender, hasta que una nube lo ocultó a sus ojos. Mientras miraban fijos al cielo viéndolo irse, se les presentaron dos personajes vestidos de blanco, que les dijeron:
«Galileos, ¿qué hacen ahí parados mirando al cielo? Este mismo Jesús que los dejó para subir al cielo, volverá de allí de la misma manera que lo vieron irse.» Palabra de Dios
Palabra de Dios
SALMO 46
TODOS: El Señor asciende entre aclamaciones.
Pueblos todos, batan palmas, aclamen a Dios con gritos de júbilo; porque el Señor es sublime y terrible, emperador de toda la tierra. /R.
Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas: toquen para Dios, toquen, toquen para nuestro Rey, toquen. /R.
Porque Dios es el Rey del mundo, toquen con maestría. Dios reina sobre las naciones, Dios se sienta en su trono sagrado. /R.
SEGUNDA LECTURA
MONICIÓN: Cristo nos salvó de una vez para siempre y nos conduce al santuario del cielo. Ésta es nuestra firme esperanza
De la Carta del apóstol San Pablo a los Efesios 1,17-23
Hermanos: Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre que nos llama a la gloria, les conceda el espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo más y más. Que Él les conserve la luz del corazón, para que puedan apreciar mejor los bienes que esperamos gracias a su llamamiento, la riqueza y esplendor de la herencia que compartirán con los ángeles, y el extraordinario poder que Dios despliega en favor de nosotros los creyentes. Se trata del mismo poder y de la misma fuerza que desplegó al resucitar a Cristo de entre los muertos y darle asiento a su derecha en el cielo, por encima de todos los tronos y grandezas, poderes y autoridades, en una palabra, de todos los seres, llámense como se llamen, en este mundo o en el otro. Todo lo puso bajo los pies de Cristo, y a Él le dio la primacía absoluta haciéndolo cabeza de la Iglesia. Porque la Iglesia es el cuerpo de Cristo como también su plenitud, y Cristo es la plenitud de todas las cosas.
Palabra de Dios
TODOS: Aleluya, aleluya, aleluya.
-«Vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos -nos dice el Señor-. Yo estoy siempre con ustedes hasta el fin de los tiempos.»
TODOS: Aleluya, aleluya, aleluya.
EVANGELIO
MONICIÓN: En el Evangelio de hoy percibimos a Jesús, ahora resucitado, convocando a los discípulos, y a la luz del perdón los invita a hacer más discípulos en todo el mundo, ofreciéndonos su compañía permanente
Según San san Mateo 28,16-20
Después que Jesús resucitó, fueron los once discípulos a Galilea, al monte que Él les había indicado. Al verlo se postraron ante Él, pero algunos dudaron. Entonces se acercó Jesús y les dijo: “Dios me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo les he mandado. Y yo estoy siempre con ustedes hasta el fin de los tiempos.”
Palabra de Dios
ORACIÓN COMUNITARIA
Padre consientes de la extraordinaria grandeza y poder que nos has mostrado en Jesús, tu Hijo, y de los efectos que produce su misterio pascual en nosotros los bautizados, miembros de tu Iglesia, te rogamos, Padre, que nos ayudes a ser testigos valientes de tu mensaje Salvador.
TODOS: Danos, Señor, la fuerza de lo alto para ser tus testigos
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1. Concede Señor a tu Iglesia la valentía para anunciar tu reinado, que el miedo a la persecución y la indiferencia no la paralicen, que ella confiando siempre en tu promesa anuncie el Evangelio hasta el confín del mundo. /R
- 2. Te pedimos, Señor, por la sociedad en la que vivimos y por todos los que gobiernan, para que no sucumban a una mirada pesimista y condenatoria, sino que permitan la difusión del Evangelio que incide de manera positiva en la transformación de la realidad. /R.
- 3. Señor, te pedimos por todos los bautizados para que, liberados de las esclavitudes que encadenan, se abran a los trascendente, a los valores del Reino, y sepan dar testimonio valiente de la acción de Dios en sus vidas. /R.
- 4. Señor, quienes estamos aquí celebrando esta fiesta de la Ascensión de nuestro Señor Jesucristo, te pedimos valentía para evangelizar y comprometernos con la esperanza de un mundo mejor, más humano, lleno de fraternidad y amor cristiano. /R.
- 5. Por nuestras comunidades cristianas, para que Cristo esté vivo entre nosotros y nos envíe su Espíritu, para edificarnos y confirmarnos unos a otros en la esperanza y en el espíritu de servicio, roguemos al Señor. /R.
CELEBRANTE: CELEBRANTE: Padre eterno, Tú que concediste a tu Hijo ascender entre aclamaciones y al son de trompetas, escucha nuestras oraciones y no de dejes de guiarnos a la plenitud del Reino de los cielos. Tu que vives y te haces presente en tu Iglesia. Amén.
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
ORACIÓN SOBRE OFRENDAS
Al celebrar -hoy- la gloriosa Ascensión de tu Hijo, te ofrecemos, Señor, este sacrificio de alabanza; que este maravilloso intercambio nos haga participar un día en la gloria del Resucitado. Que vive y reina…
ORACIÓN POSCOMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno, ya desde esta vida nos haces partícipes de los bienes celestiales; concédenos viva esperanza de llegar a tu presencia, donde nuestra naturaleza ya está glorificada en Cristo. Por JNS
BENDICIÓN
Hermanos: Jesús, el Señor, nos dice lo mismo que a los apóstoles: “Sean mis testigos ante el mundo entero”. No nos quedemos encandilados mirando al cielo, sino que, por la forma cómo vivimos el evangelio de Jesús, proclamemos su mensaje de esperanza para los habitantes de la tierra. Para ello pidamos la solemne bendición de Dios:
-Que ojalá sepamos llevar el mensaje del Señor a nuestro tiempo y a nuestros hermanos. – Amén.
-Que él continúe haciendo el bien por medio de nosotros, y que nosotros le hagamos visible hoy con nuestras obras. – Amén.
-Que él permanezca con nosotros por medio de su Espíritu, ahora y hasta el fin de los tiempos. – Amén.